Cuando está a punto de vencer el plazo impuesto por un juez para poner en libertad a Mahmoud Khalil o presentar un recurso antes de las 9.30 horas del viernes, Justin Mazzola, investigador de Amnistía Internacional Estados Unidos, ha manifestado:
“Dado que una autoridad judicial federal de primera instancia no ha encontrado base legítima para que Mahmoud Khalil continúe detenido, el gobierno de Trump debe liberarlo de inmediato.
Mahmoud Khalil, residente fijo en condiciones legales y licenciado hace poco en la Universidad de Columbia, fue detenido arbitrariamente en marzo por las autoridades de inmigración estadounidenses, cuando nunca debería haberlo sido. El gobierno de Trump lo separó de su esposa y lo obligó a perderse el nacimiento de su hijo para dar ejemplo con él, amenazar a otras personas y acallar la disidencia.
Actuar contra las personas que se manifiestan pacíficamente y amenazarlas, sobre todo por su condición de inmigrantes o su situación de residencia, constituye una afrenta a los derechos humanos. Por mucho que el gobierno de Trump intente manipular la ley, la libertad de expresión es un derecho humano, no un delito que pueda castigarse con la deportación.
Mahmoud Khalil, como todas las personas que se encuentran en Estados Unidos, debe poder ejercer sus derechos humanos a la libertad de expresión y de reunión pacífica y al debido proceso. Su detención es injusta, y hace tiempo que debió ser quedar en libertad.
El presidente Trump debe dejar de utilizar las amenazas y la intimidación como armas políticas. Los institutos y universidades deberían tomar medidas para proteger a sus estudiantes inmigrantes de la aplicación de la ley por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y garantizar que se respeta el derecho humano de todo el alumnado y profesorado a protestar en apoyo de los derechos de la población palestina y de otros asuntos.”